martes, 17 de abril de 2012

En busca del clon decente del Candy Bag

Aunque con este tiempo no apetezca sacar la ropa del verano del armario he reconocer que estoy loca por hacerlo. Eso y llenarme de colorines, especialmente en los accesorios, que es donde me suelo permitir todos los excesos posibles. Con esto de entrar en los 31 ya os comenté anteriormente que sufro cambios radicales de gusto. El último: me he enamorado del Candy bag de Furla.

Durante más de un año estuve viéndolo y horrorizándome. Yo y el plástico no somos buenos amigos y eso de que se vea todo lo que llevas en el bolso no me acaba de hacer gracia. Cual fue mi sorpresa cuando la semana pasada entré en El Corte Inglés y se me abrió la boca al encontrarme con tres de ellos de frente y no pude evitar toquetearlos. Me corté de hacerles una foto con la BB, pero principalmente porque me miraban mal las dependientas.
Son más preciosos aún que en las fotos y tienen pinta de resistentes, pero lo siento no pago 195 euros por un bolso de plástico que sé que voy a aborrecer en dos días. ¿Cuando cumpla los 32 recuperaré mi gusto sobrio? porque temo que vaya a más.

Ante esa tesitura no me queda otra que ir a la caza del ansiado clon. Y buceando por la red mi sueño se torna en pesadilla al descubrir que el único clon sería el que hizo Carrefour el año pasado. Son 15 euros, pero es que no me convence lo más mínimo. Es mucho más endeble, y por lo tanto transparente, que los Furla y tampoco es su misma forma.

Lo mismo ocurre con unos que ha sacado Pull & Bear este verano y que me gustan aún menos. La forma es más vertical y lo único en que se parece al Candy Bag es el material con el que está hecho, porque ni los colores son parecidos.


A la vista de que los clones totalmente transparentes no me convencen lo más mínimo he pensado que igual cambio de idea. Eso o espero a que me llueva del cielo un millón de euros. En la colección de primavera de Parfois he encontrado esta monería. También lo tienen con los remates en naranja pero parece que mi extravagancia apuesta más por el amarillo.


Está hecho en plástico y es transparente, pero tiene una particularidad: una bolsa interior donde guardar las cosas para que no te pueda ver todo el mundo el kleenex que acabas de usar o los envoltorios de caramelos. No nos engañemos en este país somos muy cotillas.

1 comentario:

  1. El de Parfois, sin duda, si quieres comprarte uno, que sea ese. Súper cuqui.. ^_^

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